martes, 25 de octubre de 2011

La Educación para el Futuro que Queremos (Parte I)

Vemos las noticias de hoy y no son muy alentadoras. Los efectos del cambio climático ya se hacen visibles con las condiciones extremas de lluvias y sequías. El crimen en nuestra región crece y ahora un país centroamericano - Honduras - se tilda como el más violento del mundo. Estamos en medio de una crísis financiera internacional.

Nuestro país, el cual hace no tanto gozaba de niveles de seguridad e igualdad admirables, ya padece de un deterioro en la calidad de vida, lo cual se manifiesta en el estrés que se puede percibir en las calles y el aumento de la violencia en nuestras ciudades - aunque al parecer, seguimos siendo uno de los países con más satisfacción entre la población.

Me parece que ya es tiempo para un cambio. Pero ¿de dónde vendrá ese cambio? Albert Einstein dijo, "Los problemas no se resuelvan a través del mismo nivel de pensamiento que los generó." Entonces me pregunto, ¿el sistema educativo que produjo a nuestra generación producirá una nueva generación que tenga la capacidad creativa para guiarnos por un nuevo camino?

Yo creo fírmemente que necesitamos algo diferente. Necesitamos jóvenes claros en sus valores, centrados en su respeto por otros seres humanos y el medio ambiente. Urgimos jóvenes con un autoestima fuerte, con el valor para admitir cuando se han equivocado o de buscar ayuda en otros cuando no tienen la respuesta. Necesitamos jóvenes capaces de ver más allá de una simple respuesta falsa o verdadera que han aprendido para un examen y reconocer que las respuestas que más importan se construyen del análisis y conocimiento multidisciplinario nacido de una verdadera curiosidad por lo desconocido.  Necesitamos a jóvenes que eligen una profesión porque realmente gozan de lo que están haciendo y quieren dedicarse con empeño a ello, no que hagan lo mínimo para ganarse un salario.

Creo que cada persona tiene la capacidad de contribuir en forma sustantiva a los cambios necesarios en nuestra sociedad. También tengo la plena seguridad que la pedagogía Waldorf tiene elementos importantísimos para aportar a la formación de jóvenes con las capacidades y actitudes necesarias para lograr ese cambio en busca de un futuro mejor. Para todos los que creen lo mismo, les invito a unirse a nuestro esfuerzo de brindar esta alternativa educativa a nuestros hijos e hijas.

Contáctenos en waldorfturrialba@gmail.com

¡Con mucha esperanza!
Ruth Junkin